Paraíso entre turistas y engaños
El paraíso existe, y un pedacito de él esta bien resguardado en el golfo de Tailandia. Cada destino que visitamos ocupa de una forma distinta un rinconcito de nuestro corazón, un recuerdo que nos refugia en los tiempos difíciles. De Tailandia me llevo un buen pedazo de libertad, buenos momentos, serenidad y lugares secretos, pero sin duda la gran diferencia la marcan los atardeceres mas espectaculares que jamas he disfrutado. Tan sensacionales y vistosos que llegan a absorberte de tal manera que, estés donde estés, cuando recobras la conciencia, te das cuenta de que llevas un buen rato mirando al infinito sin apenas pestañear, vagando en un mar de sensaciones.